Visitar Grecia es el sueño de muchos viajeros. Uno de los lugares más hermosos y míticos para visitar es sin lugar a dudas Corinto, ciudad del Peloponeso y mundialmente conocida por su canal que une el Mar Jónico con el Mar Egeo, y permite que más de 10.000 barcos al año puedan cruzarlo, restando al recorrido 400 kilómetros en sus 6 kilómetros de longitud y 23 metros de ancho. Lo que hace este canal es dividir en dos a Grecia, ya que separa la región del Peloponeso de la Hélade.
El Peloponeso es un lugar que no los dejará de sorprender. Sobre todo, considerando la larga historia que acompaña a Grecia. Históricamente Corinto servía de lugar de paso para llegar a la región del Peloponeso y parada obligada para quienes tenían por destino Esparta.
Según la documentación histórica, Corinto fue fundada con el nombre de Éfira por Sísifo, quien fue su primer rey. Al mismo tiempo, Corinto es mencionada por Homero como uno de los territorios que lucharon bajo el mando de Agamenón en la guerra de Troya.
Veamos los 10 lugares que visitar en Corinto en uno o dos días.
1.- El Canal de Corinto: una de las obras más importantes de la época helenística, el canal une el mar Jónico con el Egeo y es una de las principales atracciones de la ciudad.
2.- La Acrópolis de Corinto: una antigua fortaleza ubicada en la cima de una colina, ofrece vistas impresionantes de la ciudad y es el lugar perfecto para aprender sobre la historia y la cultura de la ciudad.
3.- El Templo de Afrodita: uno de los templos griegos más importantes, dedicado a la diosa de la belleza y el amor.
4.- La Casa de Sisalto: una de las casas más antiguas de la ciudad, con mosaicos bien conservados y una atmósfera auténtica.
5.- El Museo Arqueológico Nacional de Corinto: un museo que alberga una colección impresionante de artefactos y objetos históricos, incluyendo cerámica, escultura y joyas antiguas.
6.- La Basilica Bizantina de San Pablo: una impresionante iglesia bizantina construida en el siglo VI, que alberga frescos y mosaicos únicos.
7.- La Basílica Paleocristiana: una iglesia construida en el siglo V, que es famosa por sus mosaicos y esculturas antiguas.
8.- La Playa de Canálica: una hermosa playa situada en el mar Jónico, con cristalinas aguas y una amplia gama de actividades acuáticas.
9.- El Jardín Botánico Nacional de Corinto: un jardín botánico con una amplia colección de plantas y flores, con vistas impresionantes de la ciudad y el mar.
1. Akrokorinthos
El Acrocorinto es una elevación de rocas que se encuentra en Corinto y que sirvió de defensa ante las invasiones. Sin lugar a dudas un lugar estratégico que, en algún momento, contó con un templo dedicado a Afrodita. Su función principal fue la de Acrópolis principalmente durante la Edad Media.
Un valiosísimo patrimonio arqueológico se encuentra en este lugar. Es aquí en donde es posible encontrar una variopinta muestra de ruinas de mezquitas de origen turco, iglesias bizantinas, muros bizantinos, restos de torres venecianas o mausoleos islámicos. Es, en Grecia, una de las fortalezas de mayor importancia, ya que en algún momento su superficie total fue superior a la de Corinto. La Fuente Pirene está ubicada dentro del recinto amurallado.
Este emblemático punto estratégico, al estar expuesto a los ataques, sufrió diversas destrucciones. La primera durante el año 146 A.C. por parte de las tropas romanas, quienes luego la reconstruyeron. Ya en la época bizantina fue reforzada. En el siglo XII, posterior a las Cruzadas, pasa a ser la fortaleza de los francos, siendo ocupada por los Otomanos en el año 1458 y en 1715. Mismo destino sufrió por parte de los venecianos en 1687. Finalmente, en el año 1822 queda definitivamente bajo el poder de Grecia.
Cómo llegar
En automóvil: se puede llegar tomando la autopista A8 con dirección hacia Corinto-Tripoli. Una vez cruzado el canal de Corinto se debe tomar la salida Korinthos –Argos – E65. Existe aparcamiento libre de costo cerca de las ruinas.
En tren: Desde Atenas salen trenes hacia Corinto cada una hora. Desde la Estación de Corinto a Acrocorinto se recorren en taxi 6 kilómetros.
En autobús: Si bien no es la opción más fácil, es la más económica. La empresa KTEL cuneta con salidas desde la Estación de KTEL Kifissos de Atenas y llegan directo a Corinto. Una vez ahí, será necesario tomar otro autobús hacia las ruinas.
Ubicación:
Sitio arqueológico y museo: Argous 105, Archea Korinthos 200 07, Grecia.
Horarios:
Abierto de 08:00 a 15:00
Días de cierre: 1 de enero, 25 de marzo, 1 de mayo, Domingo de Pascua, 25 y 26 de diciembre.
Precios entradas:
Acceso a Acrocorinto es gratuita.
Incluye:
Templo de Apolo, vista del Istmo de Corinto y del Golfo, antiguas murallas.
Duración del recorrido:
Aproximadamente 2 horas.
Página web:
http://odysseus.culture.gr/h/3/eh355.jsp?obj_id=15661
2. Museo Arqueológico de Corinto
Siempre es interesante visitar algún museo en donde encontrarás piezas que hablan de la historia del lugar que estás visitando. Es el caso del Museo Arqueológico de Corinto. Su estructura es más bien pequeña, pero cuenta con cuatro salas divididas por temas.
La Sala “Corintia en tiempos prehistóricos” posee una muestra de vasos y figuras que han sido encontrados en asentamientos cercanos. Luego, en la Sala “Corinto, una poderosa Ciudad-Estado” podrás disfrutar de la exhibición de artículos que nos cuentan sobre su historia artística, cultos, actividades comerciales y sus actividades cotidianas.
Continuando con el recorrido, encontrarás la Sala “Asclepio, el Santuario curativo”, aquí se encuentran los hallazgos realizados en el santuario del mismo nombre. Estos son ofrendas de forma humana realizadas en arcilla que datan del siglo III A.C. Además, de estelas bizantinas que se encontraron en un cementerio cercano que data del paleocristiano. Finalmente, encontramos la Sala “Corinto, una colonia romana”. Aquí apreciarás hermosos mosaicos y esculturas romanas, así como también, objetos de la época franca y bizantina.
En el museo encontrarás dos hermosas obras llamadas los Kuros gemelos. Se trata de dos esculturas. Un Kuros representa a un hombre joven, esta habría sido utilizada por Homero como una manera de referirse a los soldados jóvenes demostrando su fortaleza física y aire de triunfo. Ambas figuras tienen una data de entre el 650-500 A.C. Su principal característica es la falta de emociones en su expresión. Un dato interesante es que ambas figuras fueron confiscadas a un traficante de arte en el año 2010.
Si desean conocer los museos más importantes de Atenas no se pierdan nuestro post dedicado: 8 Museos más importantes que conocer en Atenas.
Información Importante
Ubicación: Corinto, PC 200 07, teléfono (+30) 27410 31207
Horarios:
INVIERNO
Del 10 de diciembre al 31 de marzo de 08:30-15:30
VERANO
Del 11 de abril al 31 de agosto, 08:00-20:00
Del 1 de septiembre al 15 de septiembre, 08:00-19:30
Del 16 de septiembre al 30 de septiembre, 08:00-19:00
Del 1 de octubre al 15 de octubre, 08:00-18:30
Del 16 de octubre al 31 de octubre de 08:00-18:00,
Del 1 de noviembre al 9 de diciembre 08:00-17:00,
El Museo está cerrado por días.
1 de Enero
25 de marzo
1 de mayo
Domingo de Pascua
25 y 26 de diciembre
todos los martes durante el invierno
Precios entradas:
Completo: 8€, Reducido: 4€
Entrada gratuita para todos los siguientes días y aniversarios
Memoria de Melina Mercouri, 6 de marzo
Día Internacional de los Monumentos, 18 de abril
Día Internacional de los Museos, 18 de mayo
Días Europeos del Patrimonio Cultural – último fin de semana de cada septiembre
Aniversario del 28 de octubre
El primer domingo de cada mes, del 1 de noviembre al 31 de marzo
Página web: https://www.corinth-museum.gr/
3. Templo de Apolo
El Templo de Apolo de Corinto es el lugar más antiguo en el que es posible encontrar restos arqueológicos. Este templo posee un estilo dórico perteneciente al periodo arcaico.
Fue construido entre el 540 y el 550 A.C. sobre una altura rocosa que dominaba el Ágora de Corinto y posteriormente reformado en la época romana. El templo fue construido con un sistema llamado “arquitrabado” en piedra caliza. Destaca el hecho de que sus columnas están esculpidas a partir de un solo bloque de piedra.
El Templo de Apolo tenía un fin netamente religioso y se consideraba la Casa de Dios.
En la “Cella” o “Naos” se ubicaba la estatua del Dios al cual se dedicaba el templo. El lugar en dónde se disponían las ofrendas se llamaba “Opistodomos”. Cosa curiosa, es que, si bien era la casa de Dios, las ceremonias se realizaban en el exterior, no siendo permitido el acceso de los fieles al interior del templo. Por este motivo, era muy común encontrar altares con ofrendas en su exterior.
De acuerdo a la mitología, el lugar en donde está emplazado fue donde Belefonte captura a Pegaso. Belefonte era el príncipe de Corinto, Pegaso, el caballo alado, que habitaba en el monte Helicón cuidado por las musas. Si bien muchos querían capturarlo, sólo Belefonte pudo lograrlo gracias a unas bridas de oro que le fueron regaladas por Atenea.
Información importante
Ubicación: Acrocorinto.
4. Ciudad Antigua
Nada habla más de la historia de un lugar que su ciudad antigua. Por eso una visita a la Antigua Corinto es destino obligado. Rodeada de verdes llanuras y adornada de manantiales de agua natural, es un destino que no olvidarás. Corinto llegó a ser una importante ciudad-colonia. Quizás no lo sabías, pero en este lugar estuvo alguna vez el Apóstol Pablo durante el año 51 D.C. Si bien la ciudad se encuentra en ruinas, aún es posible ver el Templo de Apolo.
Según la historia de esta ciudad, Corinto fue fundada por Sísifo. Fue sucedido por su hijo Glauco, a quien pertenece el caballo alado Pegaso, que se convirtió en símbolo de la ciudad, apareciendo su imagen en las monedas corintias. Corinto tiene mucho de mitología, fue aquí donde Teseo da caza al jabalí; surge el mito de Arión, quien fuera rescatado por unos delfines cuando fue secuestrado por piratas; y, lugar de establecimiento de Medea y Jasón, luego de su búsqueda del Velloncino de Oro.
En Corinto se elaboraban bellas cerámicas que se hicieron conocidas más allá de los límites griegos. Mismo ocurrió con sus piezas de bronce. Corinto fue administrador de los Juegos Panhelénicos cerca de Istmia, celebrados en la época de primavera, estos fueron pensados en tributo a Poseidón, famosos por las carreras de carros y caballos. Otro hecho de gran importancia sobre Corinto, es que se convirtió en el centro de la actividad comercial que realizaban a través de los Diolkos, una ruta realizada en piedra con ranuras talladas para el tránsito de los carros, ofreciendo un atajo a los puertos de Lechaion y Kenchreai. No es secreto alguno, que en la antigua Corinto se realizaban cultos a Afrodita, también a Apolo, Deméter, Hera, Helios, Tesmoforo y Poseidón.
Las excavaciones de la antigua ciudad de Corinto se extendieron hasta el Acrokorinthos al sur de este sitio arqueológico. Entre ambos, se han descubierto templos, galerías, fuentes, el ágora Romana, balnearios, el Teatro, el Conservatorio Romano, el santuario de Asclepio y de la Salud (Asclepieion), cementerios, talleres de cerámica, murallas, así como varios otros edificios como el Barrio Franco y un número significativo de monumentos otomanos.
Cercanos al Ágora se construyeron edificios públicos y monumentos privados de ricos romanos y griegos. Los testimonios de la construcción de los edificios se encuentran en muchas inscripciones, mientras que sus representaciones se hallan principalmente en monedas locales posteriores.
Información importante
Ubicación:
Se encuentra en el Istmo de Corinto, a unos 78 km al oeste de Atenas y sobre las faldas del monte Acrocorinto.
Pàgina web: odysseus.culture.gr
5. El canal de Corinto
Su historia se remonta a tiempos antiquísimos. Fue Periandro de Corinto quien por allá en el siglo VII A.C. diseña el primer esbozo del canal, para así poder controlar el Mar Egeo. Se dice que finalmente descartó el proyecto cuando consultó al Oráculo. Lo que si construyó fue la Rampa Diolkos, cuyo fin era el de arrastrar las embarcaciones hacia la calzada de piedra para, de esa manera, lograr cruzar al otro lado del Mar Egeo.
Quien, si pensó que era una muy buena idea construirlo, fue Nerón, comenzando su excavación hacia el siglo I D.C. usando el trabajo de más de 6.000 esclavos. Pero, Galvas, su sucesor dio la orden de detener las obras dejando así el canal inconcluso.
No fue hasta 1687 que la idea de construir el Canal de Corinto resurge de la, en ese entonces, Republica de Venezia. La motivación: poder proteger los puertos ya conquistados en el Peloponeso. Sin embargo, estas sugerencias cayeron también en el olvido.
La década del 1800 da un gran giro a la historia de esta obra de ingeniería, ya que el Canal por fin ve la luz, cuando en 1869 los ingenieros franceses realizaron la magnífica obra del Canal de Suez, permitiendo de esa manera el libre acceso hacia el Golfo Pérsico. Esto crea un último impulso para que finalmente, de la mano de István Türr, Ingeniero de origen húngaro, se reiniciaran las obras. El Canal de Corinto es inaugurado el 25 de julio de 1893, transformándose en una de las más grandes obras que la historia haya conocido.
Cómo cruzar el Canal de Corinto
Ahora que ya sabemos su historia te explicaremos cómo cruzarlo. Un dato muy importante es que el Canal de Corinto es el único acceso por tierra al Puente de Patrás, que lleva a la península.
El canal cuenta con dos puentes, tanto al principio como al final. Ambos son hidráulicos y se sumergen hasta el fondo para así dejar el paso libre a los barcos. Es por esto que se debe prestar mucha atención a las señaléticas, pues, por ejemplo, la bandera azul indica que el Canal se encuentra abierto y que es posible atravesarlo. La bandera roja, en cambio, indica que hay que detenerse. Durante la noche si se ven dos luces verticales blancas indica que se puede avanzar y, si hay una solamente, se debe detener el recorrido. Hay que estar atentos a la información y revisar el calendario, ya que los días martes, el canal cierra debido a mantenimiento y dragado de las aguas. Una información importante es que los peajes se encuentran en el lado del conductor, es decir, a mano izquierda. Además, toda la señalética se encuentra en inglés.
¿Desde dónde ver el canal?
El hecho de circular por el puente sobre el canal, no permite al visitante apreciarlo en toda su magnitud. Es por ello, que la mejor manera de observarlo y tomar unas buenas fotografías es desde el puente peatonal, el cual está situado en el centro del Istmo. Otra de las vistas que se puede apreciar desde este mismo lugar, es el paso de los barcos por el canal. Ahora, si lo que queremos es disfrutar de unas hermosas vistas panorámicas hacia el mar de Corinto, Atenas y el Egeo, lo mejor es hacerlo desde el puente.
Si se cruza el canal en barco, este recorrido tiene una duración de entre cinco a diez minutos. El tiempo depende del tipo de embarcación, ya que las más grandes deben ser remolcadas debido a las dimensiones del canal, por lo que atravesarán el canal en mayor cantidad de tiempo.
Si se quiere hacer un alto en el camino, basta con aparcar el automóvil en estacionamientos (aparcaderos) situados a ambos lados de la autopista, ahí encontrarán tiendas de souvenirs y restaurantes. El lugar en sí impresiona por las altas paredes de roca que enmarcan el canal y las aguas cristalinas del Mar Egeo.
Si recorres el camino hacia el canal, te encontrarás con un paisaje que te sorprenderá. Y no se trata de la naturaleza o el mar. Desde el puente podrás observar, a ambos lados, diversos bunkers que datan de la Segunda Guerra Mundial. El lugar en donde se encuentran tiene mucha historia, ya que se construyeron posteriormente a la Batalla de Grecia, cuando alemanes e italianos conquistaron este territorio.
Información Importante
Ubicación: Isthmia, Grecia.
Diolkos, sustituto del canal de Corinto
Navegar por el mediterráneo no era tarea fácil en la antigüedad, ya que las condiciones climáticas jugaban en contra. Los viajeros debían recorrer la Costa del Peloponeso para poder llegar al Mar Egeo. Ahí nace la importancia estratégica de Corinto. Aquí aparecen los Diolkos, que eran caminos pavimentados de piedra caliza por donde las embarcaciones eran llevadas al inicio del camino y desde allí se arrastraban hasta el Diolkos. Al parecer, estas naves quedaban sobre cilindros de madera, para luego ser trasladados a una especie de vehículo con ruedas. Como una manera de alivianar las naves y hacer más fácil su traslado, estas se despojaban de su carga, la embarcación se trasladaba al Golfo Sarónico, en donde ya se encontraban las mercancías que habían sido llevadas con anterioridad a la carretera, hasta el otro extremo del Istmo, donde se volvían a cargar. Durante el siglo XIX se abrió un paso marítimo de gran importancia: el Canal de Corinto, sobre el cual ya les hemos contado.
Cómo llegar a Corinto
Corinto es un lugar que cuenta muchísimas historias y en donde podrás disfrutar de sus reconocidas pasas.
Si estás en Atenas puedes llegar a Corinto en coche. En este caso debes tomar la Autopista A75 dirección Norte y encontrarás el desvío que te llevará a Corinto. Si recorres alrededor de 70 kilómetros llegarás al canal. Por tren es posible llegar por la línea directa desde el Aeropuerto de Atenas con Corinto, pero si te encuentras en el centro de la ciudad, debes realizar un transbordo en la Estación SKA.
Si no cuentas con un automóvil, puedes llegar a esta bella ciudad usando autobuses, los que inician el recorrido desde la Terminal A (Kifissou 100). El horario en el que se puede tomar un autobús va desde las 17:30 hasta las 22:30 horas. El trayecto tiene una duración de aproximadamente 90 minutos y la frecuencia de salida de los autobuses es de 30 minutos. Por supuesto, también existen variadas ofertas mediante vistas guiadas y diferentes tours guiados.
Puedes realizar este tour de medio día desde Atenas, para conocer lo mejor de Corinto y tener tiempo para seguir explorando Atenas. Pueden ver los horarios y precios aquí.